NO SABÌA ALEMÀN: La madre de Claudio Arrau, el gran conccertista chileno de piano, a pesar de vivir muchos años en Alemania, se negò a aprender la lengua de ese paìs.Doña Lucrecia hablaba frànces fluido, pues se educò en un convento frànces, pero jamàs el inglès y el alemàn, de este ùltimo comentaba que era un idioma muy complicado.
LOS NIÑOS TAMBIÈN: Estaban presentes en la expediciòn de Don Pedro de Valdivia, quien conquistò Chile en 1541.La razòn de su presencia se debìa a que sus padres , soldados españoles, los traìan al paìs, provenientes desde el Perù, allì habìan nacido producto de las uniones clandestinas con las aborìgenes del lugar.
CRUEL CON LOS DEMÀS:Diego Portales, el gran forjador de la institucionalidad republicana imperante en Chile, tenìa un caràcter travieso hacia los demàs.Era fanàtico de las bromas pesadas, cuestiòn que queda graficada en estas dos situaciones:
-Un dìa no encontrò nada mejor que calentar el sombrero de lata que usaba el calesero ( èl era el conductor de un antiguo coche llamado calesa) de su padre, llamado Come Sapos, y se lo colocò en su cabeza, chamuscàndole asì los pelos.
-En el transcurso de una representaciòn teatral, nuestro protagonista estaba acompañado con su amigo de aventuras, Manuel Lira, en las bambalinas.Cuando el telòn cayò y el acto finalizò, Lira se arrodillò a besar los pies de una actriz de la que estaba enamorado.Portales, con su tan particular forma de ser, se diò cuenta que daba la espalda al pùblico, entonces alzò el telòn cautelosamnte, generando de èsta forma, la carcajada general y la rechifla, en algunos casos, de los asistentes.Lira, como era de esperar, jamàs le perdonò su actuar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario